Sabroso y saludable: Beneficios del agua


El agua es necesaria para que nuestro organismo lleve a cabo procesos como la respiración, la digestión o la eliminación de toxinas.

Harto conocido es que debemos tomar al menos 2 litros diarios pero esta recomendación es para las personas que no están físicamente activas, por eso depende mucho de las actividades que hagas durante el día y tu complexión, a diario tu cuerpo pierde por lo menos un litro y medio de líquido a través del sudor, el aliento y la orina.

Cuando no tomas suficiente agua, la sangre se vuelve más espesa y obliga a tu corazón a latir más rápido para compensar el déficit de líquido. Si no te da sed todo el tiempo, puedes cumplir con una parte consumiendo sopas, infusiones, frutas, verduras, leche o yogurt, alimentos que contienen un alto porcentaje de agua. Pero nunca la sustituyas por completo, procura siempre tomar agua cuando puedas.

Mucho más de la mitad de nuestro cuerpo está constituido por agua, entre 65% y 75%, sobre todo el cerebro, que está compuesto en 90% de agua. Así que sin ella, no podríamos producir la orina y eliminar los desechos que se acumulan en la sangre que terminarían por intoxicar nuestros órganos.

Toma en cuenta lo siguiente:

Si tienes hambre, toma agua, seguramente es que te sientes deshidratado y no te has dado cuenta. Para comprobar tu nivel de hidratación observa el color de tu orina, mientras más pálido, mejor. Cuanto más intenso, más agua necesitas.

Si te sientes fatigado y con dolor de cabeza prueba tomar agua, tu cuerpo podría estar deshidratado.

La deshidratación puede reducir tu capacidad para hacer ejercicio. Bebe agua, antes, durante y después para mejorar tu actividad deportiva.

Consumir agua ayuda a quemar grasas y calorías cuando está bien fría pues tu cuerpo trabaja más para eliminarla a una temperatura más alta.

El agua te ayuda a hacer la digestión de forma adecuada, con frecuencia, soluciona los problemas de acidez estomacal y junto con la fibra puede curar el estreñimiento. Durante la comida puede favorecer la disolución de los jugos gástricos, cuya principal función es la de eliminar las bacterias de los alimentos, siempre y cuando se haga de forma relajada y moderada no produce ningún daño para el organismo.

La resaca es el resultado de una grave deshidratación, la noche anterior y entre copas tómate un vaso con agua, para que veas como al día siguiente te vas a sentir mejor.

Bebe agua apenas te levantes ya que pasaste la noche en ayuna y tu cuerpo está deshidratado.  Y recuerda, al excedernos en la ingesta de líquido ponemos nuestro cuerpo al límite y ocasionamos la eliminación de importantes minerales a través de la orina, lo que puede llevarnos a padecer graves problemas de salud.

Fuentes:
Libro Vida en equilibrio. Autor: Norelys Rodríguez