Descubre tu naturaleza energética
para organizar tu hogar u oficina acorde a tus necesidades y convierte este
arte en una práctica de vida.
La
búsqueda del bienestar personal comienza desde el hogar hasta el espacio
laboral. Cuando se limpia, ordena o se botan objetos que ya no se usan, de
forma inconsciente se está aplicando el feng shui para activar las energías, la
armonía y el equilibrio en el lugar que se ocupa.
Conocedores
del tema lo definen como un arte originario de China, pero también como una
filosofía y una ciencia que se ha convertido en tendencia actualmente, y
consiste en armonizar las energías para alcanzar una vida feliz, satisfecha y
abundante.
Quienes
han experimentado la práctica del feng shui aseguran que han obtenido
resultados beneficiosos, como lo refleja el autor neozelandés Richard Webster
en su libro “Feng Shui: En tu lugar de trabajo”, quien afirma que la gente de
negocios en el Oriente consulta con regularidad a los especialistas en esta
área porque les aporta herramientas para lograr el éxito en sus negocios.
No
se trata tampoco de algo complejo. El feng shui se puede practicar con un poco
de orientación de aquellos que conocen de este arte para colocar los colores
adecuados a su espacio, escoger el estampado o unicolor de las cortinas y
lencería, definir la orientación cardinal de la cabecera de la cama, de la
silla del comedor o de algún aparato de cocina, es decir, mejorar la
distribución de su hogar.
Bárbara
Pérez, propietaria de la tienda Guayana Mística, considera que cualquier
persona que haga feng shui y utilice cualquier técnica o terapia en función de
mejorar su calidad de vida, logrará que esto repercuta positivamente en su vida,
familia, comunidad y país. “Todos deberíamos hacer feng shui, buscar y utilizar
las mejores herramientas para ser mejores personas y tener una mejor vida”.
Define tu elemento
Lo primero que se debe
descubrir es la naturaleza energética de la persona, explica María del Pilar
Catoira, arquitecta y especialista en feng shui.
“El feng shui postula
que todo es energía y se mueve a favor de las agujas del reloj en manera de
espiral. Está formada por cinco elementos: agua, que nutre la madera; la madera
que nutre al fuego, el fuego que se convierte en tierra y la tierra que se
convierte en metal. El metal se funde y se convierte en líquido, y el más
preciado es el agua. Es el ciclo armonioso que sigue la naturaleza”.
Cada persona tiene un
elemento que predomina y esto se conoce calculando el número kua (número
personal). Con este resultado se puede armonizar su hogar u oficina.
Si por ejemplo se
descubre que en un individuo influye en primer lugar la madera y en segundo el
metal, en su naturaleza estos dos elementos estarían en guerra, según explica
Catoira porque “el metal corta la madera”. La solución sería buscar un elemento
neutral entre los dos para que armonice, en este caso, el agua.
“A la hora de armonizar
tu habitación como tal, sé que debo colocar elemento agua. Lo incorporo a
través de diferentes gamas de azules en las paredes, en degradaciones de
colores agua, en aguas marinas que son azul verduzco, con componentes de la
lencería de tu cuarto igual, puedo utilizar mucho verde, naranja, fucsia,
rosado, y así estoy armonizando tu espacio con tu personalidad”.
Cómo calcular tu número kua
El
arquitecto de sueños, Alfonso León, explica en su artículo publicado en
Estampas.com, que la forma de calcular el número kua es distinto en hombres y
mujeres.
En el primer caso, se toma la fecha de
nacimiento, se suman las dos últimas cifras del año, si el resultado es más de
diez, se suman las dos cifras
para reducirlas a un solo dígito, a esto se le resta 10 y este será el
resultado. Ejemplo: 22 Agosto 1956, 5+6=11 1+1=2 10-2=8. Los hombres nacidos a partir
del año 2000 deben restar 9 al valor final.
La
mujer debe sumar las dos últimas cifras de su año de nacimiento, si el
resultado es más de 10, sumar las dos cifras para reducirlas a un solo dígito y
sumar un 5 a ese número, eso da el número kua. Ejemplo: 22
Agosto, 1956 5+6=11 1+1=2 5+2=7. Las mujeres nacidas a partir del año 2000
deben sumar 6 al valor final.
Usa la “magia”
Para Catoira en Ciudad Guayana
existe una “cultura mágica”, entre quienes “ponen el poder en los objetos y no
reconoce que el poder está en nosotros mismos” para conseguir pareja, dinero o
éxito en algún proyecto.
Bárbara Pérez cuenta
que, en su mayoría, las personas buscan aquellos objetos que son activadores de
la prosperidad como los cuarzos, las tiritas que simbolizan el oro, el gato de
la buena suerte y los inciensos.
“El rojo simboliza
celebración, simboliza la energía yan del universo, la energía masculina. La
prosperidad para los chinos, ellos usan muchísimo el color rojo. Cuando lo unes
con una pieza de jade, potencias la buena suerte en tu vida, el jade también se
vende mucho en Puerto Ordaz para propiciar las buenas energías. Para los chinos
es una piedra preciosa, de mucha sacralidad”.
Hay objetos que cuestan
desde 10 bolívares hasta de mil bolívares como la imagen de la diosa de la
fortuna. Helena del Castillo, quien aplica el feng shui en su hogar, opta por
el uso de monedas, el rosario tibetano y una pequeña fuente de agua que
considera un colector de energías para disipar las negativas y persista la
armonía en su casa.
“Son formas que
practico de forma natural, una práctica de vida que me ha dado excelentes
resultados. En mi caso me favorecen los colores naturales, los ocre, para dar
armonía a mi vivienda, también a través del feng shui hago la orientación a
nivel de mi cocina para que no se mezclen los elementos agua y fuego”.
Y como su cocina es
pequeña, entre el fregadero y las hornillas colocó unas plantas para
contrarrestar este encuentro con un elemento de la naturaleza, en este caso la
tierra. “En mi hogar evito espejos que se reflejen hacia la calle, porque no
tengo buena vibración frente a la puerta de la casa”.
Fuente: Reportaje Ucab